El señor pandero de Mona Azar, actriz porno que nunca ha ocultado su despreocupación por seguir cualquier canon físico impuesto, sigue creciendo hasta límites insospechados, sin que su dueña parezca poner freno. De hecho, ya es difícil encontrar una escena reciente de esta actriz con herencia de Oriente Medio en la que no luzca prendas estratégicas durante sus encuentros sexuales, con el evidente propósito de camuflar el exceso de grasa corporal en ciertas zonas. En estos casos, suele haber división de opiniones entre los que no les hacen ascos para nada a la abundancia carnal y aquellos que prefieren curvas femeninas con mayor firmeza. Lo que resulta evidente es que Mona Azar va camino de convertirse en una BBW (Big Beautiful Woman) o, mejor dicho, pensamos que ya se le puede catalogar con tal etiqueta.
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