Tiny Rhea, 1’45 de puro vicio e irreverencia

No todos los días una pequeña de 1,45 m te suelta que le caben sin pestañear los tronchos más bestias del porno y que encima lo disfruta. Así es Tiny Rhea, una mezcla explosiva de ternura millennial y guarrería premium que empezó mostrando las tetas en las escaleras del curro y acabó tragando creampies en vídeos tórridos como si fuese brunch del domingo. Esta excamarera con rostro de pícara domina el arte de cabalgar en posición cowgirl con truco de pies incluido, y fan de las postura de la flor de loto, donde lo romántico y el porno se dan la mano antes de romper la cama. Tiny es una bomba de contradicciones: tetas de bolsillo y sin sujetador que van por libre, labios del coño prominente, culito compacto, lujuria exacerbada. cerebro de escritora y una lengua afilada para sumar una buena dosis de morbo a sus escenas. Y aunque aún no ha hecho anal ante las cámaras, tiene ganas de marcar el momento con luces, cartel y redoble. Porque si algo tiene claro esta nena de Buffalo, es que el sexo es mejor cuando hay química, buena vibra y, si se puede, una eyaculación en la boca. Ah, y traga. Como debe ser.