Algunos pormenores biográficos de un sabroso bombón: Lily Starfire

Lily Starfire es una muchacha de tez negra con curvas pronunciadas que no pasan desapercibidas. Empezó en la industria hace unos tres años, cansada de que sus preciosas lolas solo le dieran dolor de espalda y ningún provecho. Se crió en Georgia pero vive en California, tiene 23 años y confiesa que siempre ha sido muy caliente, incluso antes de dedicarse al cine para adultos. Eligió su nombre artístico porque le flipan las flores (lilies), y el apellido Starfire está inspirado en la serie animada Teen Titans. Su primera escena fue para Casting Couch y, aunque empezó nerviosa, ya se mueve como pez en el agua. Le pone que la tomen por detrás, los tíos mayores y que le muerdan el cuello. Es más bien sumisa, le va el rollo de que le digan qué hacer y no le importa un buen estrangulamiento si hay pasión de por medio. Lo de los escupitajos…, ahí ya no entra. Se masturba varias veces a la semana con su inseparable Hitachi y le pone que el chico termine en su cara o en sus tetas, aunque tragar depende del menú del día del tipo. Es fan del porno con química real, del anime, de los videojuegos y de la lectura. ¿Lo más loco que ha hecho? Echar un polvo exprés al aire libre en pleno campus universitario, pero lo cierto es que tampoco es para tanto.