PussyFer
Cassidy Luxe no se anda con rodeos. Esta tía tatuada y con curvas tuneadas dejó atrás su curro de oficina en una empresa de piensos para lanzarse de cabeza al porno. ¿El detonante? Una pandemia, un jefe rancio y una cuenta de OnlyFans que empezó como experimento y acabó siendo su pasaporte a una vida de libertad sexual total. Nació en Pensilvania, pero hace cinco años se trasladó a Florida, donde encontró su lugar. Tiene 32 años, lleva 3 dando guerra en el porno y se percibe que le gusta lo que hace. Multiplicó el sueldo de su trabajo de oficina en solo unas semanas enseñando cacho en internet, y luego se estrenó como stripper ganando 500 dólares el primer día. Ahí ya vio que estaba hecha para esto. Adora los tatuajes (vaya novedad) y lleva más de 20 distribuidos por todo el cuerpo, con especial amor por el del estómago (que le dolió como el demonio) y su brazo negro estilo manga inversa.Su alias nació entre postres en una cena con colegas. Quería algo que sonara bien, fácil de buscar y que no fuera tan exótico como su nombre de stripper. Y así nació Cassidy Luxe, con aprobación de su amiga y mentora Shay Fox, que además era su vecina. En el set lo da todo y más. Le va lo extremo: “No puedes follarme lo bastante fuerte”, suelta sin rubor. Su postura favorita en cámara es el reverse pile driver en versión anal. Y es que lo suyo es el sexo rudo, mordiscos, manos al cuello, squirt meadas en la cara…
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