Emma Rosie y Natalie Brooks buscan un nuevo impulso en la industria pornográfica

Cuando te llama Spiegler, no preguntas: dices “sí” y te pones las rodilleras. Eso es justo lo que han hecho Emma Rosie y Natalie Brooks, las dos últimas fichajes del agente más temido (y codiciado) de la industria del porno: Mark Spiegler, el padrino que convierte a actrices en leyendas. Y es que si alguien reparte los carnets de superestrella, es él. Y ahora estas dos chicas ya tienen el suyo. No llega al metro y medio, pero Emma Rosie tiene más fuego en el cuerpo que un after en Berlín. En solo cinco meses ha pasado de ser la niña callada del fondo de la clase a convertirse en un fenómeno imparable: ha firmado contrato con Nubiles, ha pasado por Evil Angel, Vixen, SexLikeReal… Y hasta ha probado la intensidad rectal de Dredd, que no es precisamente un paseo por el campo.

Por su parte, Natalie Brooks, con muchas tablas, ya que tiene en su haber casi 300 escenas desde que debutó en 2018. Ha sido la reina de las colaboraciones en OnlyFans y ManyVids, y se ha hecho un nombre sin hacer anal (todavía) . Pero se acabó el perfil bajo. Natalie se ha cansado de ser la eterna promesa. Este nuevo capítulo bajo el ala de Spiegler viene con gangbangs, blowbangs, y la promesa de abrir nuevos territorios… literalmente. Brooks quiere papeles con diálogo, escenas potentes y, sí, por fin el anal, para alegría de sus fans más hambrientos.