Lilith Grace toma un nuevo impulso sexual por detrás

«¿Quién coño es esa?» La pregunta era recurrente como un eco en el evento del magazine digital PornCrush, donde la recién llegada Lilith Grace dejó a medio Porn Valley con la baba caída y las entrepiernas embutidas. Entre tantas estrellas del porno, ella brillaba como una supernova, con una mirada que prometía pecados en HD. No es de extrañar que esté en boca de todos (y no solo en sentido metafórico); Lilith se ha pasado los últimos meses empalmando a media industria, desde Vince Karter hasta Dredd, que le reventó el culo como si fuera un exorcismo a pollazos. Y mientras tanto, en sus ratos libres, la advenediza de machacaba en el gym, esculpiendo un culazo que podría declararse bien de interés sexual. Pero no siempre fue así. Hace cinco meses, Grace estaba hecha una mierda, alejada del porno después de que su exrepresentante intentara joderla de la peor manera. Hubo noches oscuras, lágrimas y dudas, pero no se rindió. Firmó con Foxxx Models y volvió a Los Ángeles con energías renovadas.