Hay debutantes que llegan, apenas enseñan una teta y desaparecen como si se las hubiera tragado una agujero negro. Otras parecen tener más ganas de merendar galletitas con la abuela que de mojar sábanas frente a cámara. Pero Raven Lane está en otra dimensión. Apareció en 2023 con la energía de una groupie en un after y el físico de una fantasía hecha carne: piel de porcelana, hermosa melena negra, curvas sensuales y unas tetas 32C que desafían toda lógica gravitacional.
En sus primeras entrevistas se reía, jugueteaba con el equipo y hablaba de sexo como quien comenta el clima, con plena soltura. Y eso, en un mundo lleno de poses, se agradece. Su tatuaje de una flor de loto bajo las tetas es casi su firma, como el lunar de Marilyn o el escote de Salma. Y ojo, que no tardó nada en tirarse de cabeza al anal como quien se mete a la pileta sin probar el agua.
Su carrera fue subiendo de a poco, como un buen polvo que arranca con besos y termina en gritos. Hace poco estaba en la cresta de la ola con una nominación a Best New Starlet en los AVN 2025. Pero justo cuando parecía que se venía el bombazo, silencio. Se tomó un respiro, se fue a rodar una peli de terror a Nashville y se alejó un mes de los sets porno.
Este verano volvió con las pilas puestas, pero algunos estudios todavía andan dormidos. Menos mal que Vixen, Kink y Evil Angel tienen buen ojo y ya la pusieron de nuevo en acción. Ahora falta que reaccionen los otros gigantes, como Jules Jordan, Brazzers, Adult Time, New Sensations. ¡Despertad insensatos!
Loading…