Brenda Trindade: bikinis, poses, porno y un ejército de seguidores en trance

Por lo visto, hace poco más de dos años no la conocía ni Dios, y ahora la brasileña Brenda Trindade tiene a casi 300.000 personas pegadas al móvil como si fueran yonquis de sus curvas. La chavala se ha montado un imperio a base de bikinis imposibles, POVs ardientes y playbacks que dejan al personal empalmado ehipnotizado. Total, que lo mismo te vende un atardecer en Copacabana que te clava una mirada de esas que atraviesan la pantalla, mientras se la clavan a ella, claro está.

Su fórmula funciona como un tiro a través de una sensualidad descarada, un puntito de humor y ese rollo brasileño que convierte cualquier vídeo en un chute de dopamina. El clip “When he arrives with his friends” pasó del millón de reproducciones porque, claro, ¿quién no querría ser ese “amigo” que llega de visita?

En Instagram sigue el festival, con bikinis, poses, el perro Chanel de estrella invitada… Y en plataformas como Pepper u OnlyFans, directamente sube la temperatura dejándose penetrar hasta ese pedazo de culo que gasta la muñeca. Brenda ha entendido de maravilla que la influencia hoy se mide en likes y, por supuesto, en cuánto consigue que la gente se rasque el bolsillo por verla un poquito más de cerca. Y ella, sin despeinarse, te lleva al huerto.