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Las brutales secuencias pornográficas de Charlotte Gainsbourg en «Nymphomaniac» (2013), de Lars von Trier

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La actriz anglo-francesa Charlotte Gainsbourg (50 años) no es ajena a trabajar con el provocador más famoso de Dinamarca: el director danés Lars von Trier. Lo decimos porque ya trabajó para él en «Anticristo» (2009) y «Melancolía» (2011) antes de interpretar a la ninfóamana protagonista de «Nymphomaniac». Y es que el papel de Gainsbourg es la de una empedernida ninfómana que va narrando su vida sexual a lo largo de los años. Todo sin pelos en la lengua. La fiel actriz aparece principalmente en el «Volumen II» de la película, que es la parte donde las secuencias sexuales adquieren un matiz más extremo y brutalmente pornográfico.

Lo más sorprendente de este caso, que desde JaqueMateAteos relatamos, es que la actriz nacida en Londres pertenece a la religión judía y antes de aceptar el papel protagonista tenía en mente rodar una película simplemente erótica, pero no con secuencias pornográficas. De ahí que no se atreviera con los momentos de sexo explícito y tuviera que ser sustituida por una actriz de doblaje que se dedicaba al negocio de la pornografía (no hemos descubierto su nombre). Algo entendible por la crudeza lúbrica de su secuencia más memorable: una doble penetración interracial que no tiene nada que envidiar al cine de adultos.

En serio, las escenas explícitas son puramente pornográficas. Incluso muchos cinéfilos y seguidores de Lars von Trier quedaron estupefactos al contemplar la escena de los hombres negros en la que empalan a Charlotte con dos penes erectos. Se trató de una toma sexual explícita que intercalaron en la polémica película del cineasta danés. Y es que Lars von Trier elevó las expectativas de sus seguidores con planos de sexo explícito, reales, algo que ya es habitual en el estilo del holandés desde que provocó a la Iglesia con su historias sexuales pecaminosas del film «Anticristo».

La doble penetración interracial de Charlotte Gainsbourg

Es justo en el momento en que su protagonista, la ninfómana Charlotte Gainsbourg, decide hacer un trío junto con dos negros senegaleses. Dos inmigrantes que se dedican a ofrecer estos servicios sexuales a mujeres desatendidas. Los tres se dan cita en la habitación de un sórdido motel, ya sabéis, usado para este tipo de encuentros íntimos. Posiblemente, lo más fuerte que hemos viste en una sala de cine convencional. Más que nada porque se ve perfectamente como sus dos grandes pollas negras empalmadas penetran el ano y la vagina de la actriz. Tan real como lo que sucede en la productora Blacked.

La polémica película pertenece al género alternativo europeo, ese tipo de cine gafapasta que solo una pequeña élite de snobs son aptos para entenderla. Aunque personalmente creemos que se han tirado el rollo y no es más que una excusa para meter un tema sexual que a todo el mundo interesa: subir audiencia y recaudación de taquilla. El único hándicap que encontramos es que realmente no es la actriz la que interviene en esas tomas candentes, pues Charlotte Gainsbourg no folla de verdad en la película. Algo que, por cierto, muy pocas actrices han hecho por el cine y su profesión por motivos que saltan a la vista.

Sobre la sinopsis de «Nymphomaniac» tenemos que decir que no es nada del otro mundo. La película narra la evolución de la sexualidad de la protagonista a lo largo de su vida; una ninfómana empedernida que trata de resolver su adicción al sexo. Todo ello intercalado de numerosas escenas de cama excesivamente tórridas y muchas veces alocadas, como cuando ella, de joven (Stacy Madison), se sube al tren y practica sexo con todos los pasajeros masculinos por tal de ganar una apuesta con su amiga. Ambas chicas jóvenes e insaciables sexualmente. Durante la época que representa la juventud (recordemos que son dos volúmenes cada uno de 2 horas) el personaje es interpretado por Stacy Madison, una conocida camgirl que ya coqueteaba con el porno suave.

Pero cuidado, la película «Nymphomaniac» ha sido censurada en algunos países y han borrado varias de sus escenas sexuales. De ahí que exista una versión censurada y otra versión completa del director. Se censuraron buena parte de las escenas porno y se eliminó contenido original por considerarse demasiado explícito. Por suerte, hasta en la versión censurada se puede ver a una atormentada Charlotte practicando sexo en buena parte de la cinta con todo tipo de hombres. A saber la de secuelas que le acarreo esta película.

Las secuencias más pornográficas de «Nymphomaniac»: