in

Retazos de porno retro del director francés Fabien Lafait

Twitter Telegram Whatsapp

Fabien Lafait es como el abuelo cebolleta del porno francés. Pero uno con cámara en mano y un currículum de treinta años repleto de tetas, parodias y rodajes imposibles. Empezó vendiendo cintas en un videoclub y acabó codeándose con las grandes divas del cine X; desde Olivia Del Rio hasta Nina Roberts, a la que descubrió y rebautizó después de verla rodar casi en bragas por los Campos Elíseos. Fanático del western y del humor franchute, convirtió cualquier ranchito o cottage inglés en set de rodaje, sacando tres películas por semana y con tal ambientazo que hasta se formaban parejas. Se especializó en parodias que mezclaban morbo y localización real, como Bienvenue chez les Ch’tites Coquines, rodada en los mismos sitios que la película original, o Wild Wild Sex, un western X. Hoy, con 63 años, ya no graba tanto, pero sigue al pie del cañón como redactor jefe de Hot Vidéo, la “Biblia” del porno francés de los 90, mientras suelta perlas sobre que en sus rodajes “se hablaba poco y se follaba mucho”. Entre escena y escena, todavía le queda tiempo para rajar de la falta de glamour del porno actual, llorar por el papel perdido y recordar que, antes de todo esto, fue locutor de radio. Vamos, un tío que ha vivido tres vidas y todas con el mismo denominador común, hacer lo que le da la gana y disfrutarlo.