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Peta Jensen y el toque de lo artificial

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Los antiguos Griegos decían que la virtud se encontraba en el equilibrio de las cosas. En el mundo del porno sucede lo mismo, incluso en las grandes producciones. Y es que desgranando la última película que lleva el sello doble ZZ de Brazzers, ‘Rubbing Down A Horny Slut 4‘, nos damos cuenta que para el elenco de señoritas contratadas se ha hecho criba por la disparidad artificial de los implantes de pecho. Como era de esperar vimos a una Peta Jensen pletórica, que siguiendo la ética helénica posee un equilibrio entre anatomía natural y cirugía de añadidos. En otras palabras un físico cincelado estupendo gracias a su ADN privilegiado, el trabajo físico del gimnasio y los minuciosos arreglos estéticos. El film, por cierto, de una duración de casi dos horas se divide en 6 escenas con otras starlets de la talla de Ana Bell Peaks, Dillion Harper o Kelsi Monroe.