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Los ahegaos más gozosos en los rostros de las pornostars

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Si sois amantes de los animes japoneses sabréis que un ahegado es una reacción espontánea en los rostros de las mujeres que sucede durante el coito y mientras la cual se producen unos involuntarios gestos faciales que nos indican que está sintiendo un gran placer sexual. Ante todo es un recurso erótico para excitar al público masculino, de ahí que las camgirls, coplayers y webcamers amateurs sean las performers que más ahegaos realicen para incrementar su recaudación: Mary Jane Aurin, Purple Bitch, Shaiden Rogue, etc. Y no nos olvidemos del hentai, un subgénero que también utiliza este subterfugio orgásmico.

Los ahegaos por regla general contradicen el cliché de que las starlets siempre fingen orgasmos y simulan convulsiones para imitar el orgasmo femenino (aunque en JaqueMateAteos ya lo desmentimos con un impresionante documento gráfico de intensos orgasmos femeninos). De esta forma se desmontaría este mito de que las mujeres no disfrutan haciendo porno. Aunque si que es cierto que a muchas pornostars se les nota una actuación exagerada, unas se ponen demasiado histriónicas y otras no pueden disimular cara de aburridas o desganadas.

Pero no es todo actuación, puesto que tampoco son de piedra. Puede que los orgasmos tengan un porcentaje de simulación, pero hay cosas que o bien no se pueden fingir o son gajes del oficio que aprenden con la experiencia, como por ejemplo, los espasmos incontrolados. Y luego está el poner los ojos en blanco o bizquear, sacar la lengua y deslizar la pupila hacia arriba como si la starlet estuviera poseída o en trance.

No olvidemos el enrojecimiento de la cara que suele tener cuando llega al clímax sexual, algo que obviamente no se puede simular, como le ocurrió a Lupe Burnett sufriendo un bestial orgasmo). Lo que mas llama la atención es la ruborización de la piel al momento de llegar al culmen sexual, sobre todo porque algunas ponen muy coloradas. Por eso decimos que los orgasmos y las caras se puede aprender a simularlos, pero a ver como se pone como un tomate de rojo francamente no lo creemos.